Nazaré y la ola de 30 metros
“Sin querer queriendo”, decía el Chavo del ocho, aquel que llenaba mi pantalla cuando era niño (y no tan niño también). Cuando cualquier persona arranca
“Sin querer queriendo”, decía el Chavo del ocho, aquel que llenaba mi pantalla cuando era niño (y no tan niño también). Cuando cualquier persona arranca