La Plata despierta tus sentidos (otros)
En el post anterior les conté que la visita a la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, había despertado en mí muchos sentidos, pero no les conté todo… hubo mucho más…
Sentido de la imaginación
Si hay algo que en el recorrido por una ciudad puede despertar tu imaginación, ese algo es una leyenda urbana. Por eso me gustan tanto. Creo que tienen el condimento justo de verdad, mentira, suspenso e imaginación que una buena historia necesita. Cuenta la leyenda que la ciudad de La Plata está llena de símbolos masónicos, es más, al parecer, en el propio plano de la ciudad se pueden leer mensajes pertenecientes a estas logias. Según dicen los eruditos en el tema, tanto Dardo Rocha (el fundador de la ciudad), como Pedro Benoit (el arquitecto encargado del trazado urbano) pertenecían a una logia masónica. Estas logias no se llevaban muy bien con la Iglesia católica y así como dejaron símbolos para transmitir mensajes en el trazado urbano, en el cementerio de la ciudad y en otros importantes edificios, también le dejaron algunos mensajes a la Iglesia. Para eso eligieron la Plaza Moreno, frente a la cual se ubica la Catedral de La Plata, uno de los edificios más bellos de la ciudad.
En la plaza se colocaron algunas estatuas, cuatro de ellas representan las cuatro estaciones del año. Pero además, tienen algo especial. Si uno las mira de frente no nos dicen mucho, son estatuas de mujeres tradicionales. Pero si damos una vuelta y miramos con atención sus manos…
¿Qué vieron? Sí, unos «cuernos» hechos con mucha dulzura…
Otra de las estatuas es la del arquero divino. Si hacemos un ejercicio de imaginación y prolongamos el arco y la flecha (que ya no están) vemos que esa línea imaginaria llega justo a una de las cúpulas de la Catedral. ¿Lo sabían? A mí me sorprendió muchísimo esta historia, sobre todo lo de las estatuas con los «cuernos».
Para todos los que estén interesados en el tema de la masonería platense les dejo este link. Si van a visitar la ciudad y les gusta el tema, les recomiendo leerlo antes para descubrir los símbolos masónicos mientras caminan por las calles de la ciudad de las diagonales.
Ahora los invito a seguir imaginando… Si tuvieran que elegir cinco o seis objetos que identifiquen a esta época para que cuando en 100 años alguien los encuentre sepa cómo era la vida cien años atrás… ¿qué objetos escogerían? A mí me costó, pero ya pensé algunos. Ustedes se preguntarán qué tiene que ver esto con La Plata… Les cuento. Cuando fundaron la ciudad, colocaron dentro de la piedra fundacional que se encuentra en el centro de la Plaza Moreno (centro geográfico de la ciudad) las cartas de fundación de la misma, un ejemplar de la primera constitución de la provincia y algunas monedas y medallas. Todo esto se extrajo de la piedra el día del Centenario de la fundación de la ciudad, el 19 de noviembre de 1982. En ese momento se colocaron otros elementos para que dentro de 100 años las futuras generación sepan qué ocurría en la ciudad, el país y en el mundo 100 años antes. Por ejemplo, se colocaron dos ejemplares de periódicos locales (El Día y La Gaceta), medallas de organismos oficiales y una fotografía aérea de la Plaza Moreno. Yo creo que además de los diarios hubiera puesto otras cosas… ¿ustedes que pondrían? Estaría bueno hacer esto en todas las ciudades, no?
El sentido de la memoria
Cuando se estaba acercando el 24 de marzo escribí un post sobre los lugares de la memoria en Buenos Aires. Los invito a leerlo para que puedan entender por qué La Plata despertó en mi el sentido de la memoria. Caminando por sus calles me encontré con carteles e inscripciones que recordaban sucesos y momentos de la historia argentina. Algunos son trágicos, como el recuerdo de la Guerra de Malvinas y la cara de Julio López (un desaparecido en democracia que hace más de tres años «nadie» sabe sobre su paradero), pero también hay de los otros, como las inscripciones que recuerdan resultados futbolísticos entre Gimnasia y Esgrima de La Plata y Estudiantes (los dos equipos de fútbol de la ciudad).
Las imágenes «aéreas» de la Plaza Moreno fueron tomadas desde el mirador de la Catedral, a 63 metros.
Para seguir con el sentido de la memoria, los chicos del blogtrip nos llevaron a conocer el Centro Cultural islas Malvinas, en un nuevo espacio abierto de la ciudad. En ese edificio funcionaba el Casino de Oficiales del Regimiento 7 de Infantería y desde allí salieron en 1982 miles de jóvenes que participaron en la inexplicable guerra de Malvinas. Hoy en día es un centro cultural con microcine, auditorio, salas de exposiciones, café y restaurante, entre otras atracciones. Además de descansar y tomar un rico café en el lugar descubrimos a un grupo de fanáticos de las técnicas y estrategias de guerra jugando e intercambiando muñecos y tanques. Yo no digo que esté mal lo que estaban haciendo, pero me pareció por lo menos extraño que lo hagan en un lugar donde se recuerda a los caídos en la guerra.
Descubrir los lugares de la memoria en una ciudad es una de las actividades que más me gustan. Sobre todo aquellos lugares que surgen espontáneamente y no son «oficiales». Como siempre digo, no tienen que ser lugares que nos traigan malos recuerdos, pueden despertar en nuestra memoria sucesos de la infancia, de la adolescencia, del primer beso, del primer fracaso, del exámen no aprobado… de lo que se les ocurra. Por eso me encantó que La Plata despertara mi sentido de la memoria. Algo tan necesario en el mundo de hoy.
Sentido de la curiosidad
La ciudad tiene un montón de lugares que despiertan el sentido de la curiosidad, tanto para chicos como para grandes. Uno de ellos es el Museo de Ciencias Naturales donde los amantes de los fósiles y las colecciones etnográficas y arqueológicas pueden disfrutar de más de 3 millones de objetos en sus más de 20 salas. La decoración y disposición de los objetos parece que se detuvo en el tiempo, ya que hasta los carteles indicativos «son viejos», pero eso no impide que los chicos de todas las edades se sorprendan y pregunten sobre los enormes animales prehistóricos mientras la guía del lugar no para de hacerles abrir los ojos.
Pero si el museo no despierta tu curiosidad, a lo mejor sí lo hace la Casa Curutchet, la única obra del arquitecto francés Le Corbusier en Latinoamérica. Convengamos que mi fuerte no es la arquitectura, pero debo reconocer que no es una casa común. Según los entendidos, este arquitecto logró plasmar en esta obra los cinco puntos de lo que se llamó la «nueva arquitectura» y se consideró un gran aporte a la arquitectura moderna. Debo confesar que lo que más me llamó la atención es la última planta donde se encuentran los dormitorios del matrimonio y sus dos hijas. Allí, los espacios son desproporcionados para una mirada como la mía, ya que por ejemplo el «pasillo» para pasar desde la cocina al baño y a uno de los cuartos es muy angosto, mientras que otros espacios son demasiado anchos. En 2010 se estrenó la película El hombre de al lado, que se filmó en esta casa. Una buena opción para descubrirla antes de viajar y aplacar la curiosidad.
El sentido del olfato
Si bien este no lo comprobé, nos contaron que a La Plata también le dicen la Ciudad de los Tilos por el riquísimo aroma a tilo que invade la ciudad en ciertas épocas del año. Como me encanta este olor y me recuerda a las calles de mi barrio… no me va a quedar otra opción que volver para comprobarlo…
Fue un placer redescubrir la ciudad de La Plata. Para todos los que quieran conocerla pueden obtener más información sobre otros atractivos, como el Estadio Único de la Plata y el paseo Dardo Rocha, en laplatago.com.
Datos útiles
– Museo de Ciencias Naturales. El museo se ubica en el espacio verde conocido como El Bosque, donde también pueden visitar el zoológico de la ciudad, el anfiteatro del lago, el hipódromo y los estadios de fútbol de los equipos platenses. La entrada general al museo tiene un valor de 6 pesos y los martes (no feriados) es gratis.
– Casa Curutchet. La entrada cuesta 10 pesos argentinos para los nacionales y 40 pesos para los extranjeros. La visita guiada dura, aproximadamente, 45 minutos. La dirección es calle 53, número 320.
– Centro Cultural islas Malvinas. En este link pueden conocer las actividades programadas para cada mes. El centro se ubica en las avenidas 19 y 51.
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