Magia en Vilcabamba: isla de la longevidad
“No coma con sal, deje el cigarrillo, afloje con el café y con el alcohol y relájese que ya no tiene 20 años abuelo, ¿me
Nuestro paso por Quito
Un post de esos “cambalache” sobre Quito, con mini-post para todos los gustos y los pedidos. Es un poco largo, pero pueden elegir qué leer
Medellín, mucho más que Pablo Escobar
Así como en Venezuela todos aquellos con los que nos cruzábamos (hasta en el supermercado o en la ruta) sentían la necesidad de explicarnos por
“Estas cosas existen aquí… en Guachirongo”
Hay muchos personajes en el mundo que merecen plasmar su vida en un libro. Uno de ellos es Wilmer Peraza, ex guerrillero del partido revolucionario
Llegamos a Maracay, a dedo y bajo la lluvia
A las 6 de la mañana nos subimos a la camioneta Toyota Hilux de Raúl camino a Maracay. Raúl es un argentino que abandonó Comodoro
Anaco, más allá de nuestro proyecto
Una ciudad sobre una enorme reserva de gas: eso es Anaco. El corazón gasífero de Venezuela. No sólo las oficinas de PDVSA gas están aquí,
Sabores de Brasil
Estamos un poco atrasados con el blog, porque ya estamos en Holanda y también tenemos muchas cosas para contarles, pero igualmente decidimos inaugurar una nueva
Ouro Preto en Mina Gerais
“Si tuviera 10 vidas, 10 vidas daría”. Palabras más, palabras menos, fueron las que pronunció “Tiradentes” (Joaquín José da Silva Xavier), uno de los líderes
Una noche en Belo Horizonte
Dentro de todo lo que nuestros amigos brasileros nos tenían preparado no podía faltar una salida nocturna. Ya alojados muy a gusto en Belo Horizonte,
El artista de la escalera: Jorge Selarón
“Los genios llevamos al enemigo adentro, porque continuamente queremos superarnos y tenemos que competir con nosotros mismos. Es muy difícil ser un genio como yo”.
Timóteo o Acesita, la semilla de nuestro proyecto
La ciudad de Timóteo (se pronuncia Chimóteo) se encuentra en el estado de Mina Gerais. Después de 10 horas de bus desde Río de Janeiro,
Y al tercer día en Río de Janeiro… salió el sol
La primera vez en Río de Janeiro la ciudad nos recibió con lluvia, humedad y el famoso Cristo Redentor cubierto de andamios… pero no íbamos